El proyecto ‘Volar más limpio’ de la compañía reúne las líneas maestras para reducir la huella de carbono de su actividad.
Se trata de aviones bimotores, mucho más silenciosos y con una autonomía para recorrer hasta 14.800 kilómetros. Consumen un 25% menos de combustible y, por tanto, se reducen en un 25% las emisiones de CO2 en su operación.
Iberia trabaja también en el proyecto LIFE Zero Cabin Waste, cuyo objetivo es implantar un modelo sostenible de separación de residuos a bordo, que permita su reciclaje y recuperar el 80% de los que se generan en las cabinas. Desde este mes de mayo, este proyecto ya está implementado en todos los vuelos de la compañía lo que supone, en un año, una reducción de CO2 equivalente a las emisiones de 340 vuelos entre Madrid y Barcelona.
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En los últimos cuatro años Iberia ha renovado el 80% de los equipos de tierra: un 40% de los vehículos que utiliza para atender a los aviones ya son eléctricos.
Dentro del proyecto ‘Volar más limpio’ se incluyen otras iniciativas para la reducción del consumo de combustible, como la creación de un Grupo de Soporte de Eficiencia de Combustible; la mejora en la política de aeropuertos alternativos, lo que reduce la necesidad de carga extra de combustible; y la operación del vuelo a un nivel de altitud que optimice el consumo de queroseno.
Como conclusión, podemos ver que tiene muchas iniciativas y que la empresa Iberia aspira a un crecimiento sostenible y eficiente, para que podamos seguir soñando a lo grande.
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